Los principales retos de un buen reclutamiento
Para poder crecer y desarrollarse, toda empresa necesita pasar por la fase de reclutamiento. Este proceso puede apoyarse tanto en recursos internos de la empresa como en fuentes externas. Sin embargo, el reclutamiento suele ser subestimado, a pesar de que es un factor clave para el éxito de una organización.
Leer más
Discapacidad laboral: hacia un nueva perspectiva
En línea en viernes 01, marzo 2024
Actualizado el viernes 01 marzo 2024
La discapacidad, ya sea física, mental, sensorial o psicológica, es una realidad que afecta a millones de personas en todo el mundo. Por desgracia, a pesar de los avances legislativos y sociales, persisten los prejuicios y los estereotipos, que a menudo alimentan la exclusión y la discriminación. Sin embargo, cambiar nuestra forma de ver la discapacidad no sólo es esencial para promover la inclusión social, sino también para fomentar el respeto de los derechos fundamentales de todas las personas. Como realidad compleja, la discapacidad debe abordarse desde distintos ángulos.
Empleo y discapacidad en España
En España, el empleo para personas con discapacidad ha sido un área de enfoque importante en términos de políticas públicas y legislación laboral. La Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social establece medidas para promover la igualdad de oportunidades en el ámbito laboral.
Según el artículo 42.1 de la Ley General de los Derechos de las Personas con Discapacidad y de su inclusión social, Las empresas con más de 50 empleados están obligadas a reservar un porcentaje de sus puestos de trabajo para personas con discapacidad, o bien contratar servicios de empresas de inserción laboral. Este porcentaje varía dependiendo del tamaño de la empresa, pero generalmente es del 2% al 7%.
Sin embargo, a pesar de estas medidas, las personas con discapacidad aún enfrentan barreras para acceder al empleo, como la discriminación, la falta de accesibilidad en el lugar de trabajo y la falta de formación específica. Se están llevando a cabo iniciativas para mejorar la inclusión laboral, como programas de formación y sensibilización para empleadores, así como incentivos fiscales para las empresas que contratan a personas con discapacidad
En 2022, en España, de un total de 20,159,317 afiliados a la Seguridad Social, 315,850 eran personas con discapacidad, representando el 1.57% del total. Esto marca un aumento ya que en 2021 se registró 1.52% , lo que indica un crecimiento del 6,67 %, mostrando un aumento progresivo de su peso dentro de la fuerza laboral (datos del SEPE)
La tasa de desempleo de personas con discapacidaden 2022 fue del 25,3%, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esto significa que aproximadamente una cuarta parte de las personas con discapacidad en edad laboral estaban desempleadas durante ese año.
El 80% de las discapacidades se consideran «invisibles», pero eso no es motivo para hacer invisible la discapacidad.
Otro fenómeno, y no el menor, es que muchos trabajadores con una discapacidad que la mayoría de las veces es invisible ni siquiera se atreven a presentar su Certificado de Discapacidad ¿Por qué ? Sencillamente por miedo a ser penalizados o discriminados en el trabajo. Y eso es una tragedia. Porque en lugar de aprovechar al máximo su Certificado de Discapacidad, y por tanto conseguir rápidamente una silla adaptada, por ejemplo, algunos trabajadores con discapacidad prefieren no decir nada y sufrir en silencio. Y no hay duda de que somos menos productivos cuando sufrimos dolores musculares o de otro tipo…
#1 Informar a la gente sobre las discapacidades
Comprender la diversidad de la discapacidad
El primer paso para cambiar nuestra forma de ver la discapacidad es informar a la gente sobre su diversidad. La discapacidad no puede reducirse a una sola condición, sino que abarca multitud de situaciones, ya sean físicas, mentales, sensoriales o psicológicas. Al conocer las distintas formas de discapacidad, sus causas y consecuencias, estamos mejor preparados para comprender los retos a los que se enfrentan las personas con discapacidad en el lugar de trabajo.
Y por retos me refiero a retos reales, en el sentido literal de la palabra. Quizá el ejemplo más elocuente sea el del usuario de silla de ruedas. Cuando vas en silla de ruedas, hay muchos obstáculos en tu camino:
- Aceras demasiado estrechas.
- aceras con baches
- Espacios reservados utilizados por personas sin discapacidad. 😡
- etc.
Lo que me lleva a decir lo siguiente: nadie tiene una capacidad de adaptación tan enorme como las personas con discapacidad. Esto es tan cierto para las personas en silla de ruedas como para las personas con problemas de audición, por ejemplo. Imagina el esfuerzo y la energía que supone leer los labios, ¡incluso cuando es posible!
Pero volvamos al tema. Hay dos formas de informar sobre la discapacidad en el trabajo:
- Puedes informarte tú mismo, pero con el riesgo de malinterpretar la información o distorsionarla inconscientemente.
- Recurre a un especialista en el tema para abrir el diálogo dentro de la empresa
#2 Sensibilizar sobre las discapacidades
Promover la inclusión
Sensibilizar sobre la inclusión es esencial para cambiar la forma en que la gente ve la discapacidad. En otras palabras, significa reconocer que toda persona, sea cual sea su discapacidad, tiene derecho a participar plenamente en la sociedad. Al concienciar sobre la importancia de crear entornos accesibles e inclusivos en todos los ámbitos de la vida, podemos fomentar una cultura de inclusión y diversidad, y hay una serie de «pequeñas» cosas que pueden marcar una gran diferencia, ¡la más importante de las cuales es respetar las elecciones de vocabulario de las personas afectadas!
- Evita el lenguaje estigmatizador: «Discapacitado», «inválido», «deficiente»… las palabras utilizadas para identificar a las personas con discapacidad suelen ser estigmatizadoras. Pero sensibilizar también significa utilizar un lenguaje respetuoso e integrador. Es importante evitar términos peyorativos o simplistas al hablar de discapacidad, y utilizar un lenguaje que destaque a la persona antes que a la discapacidad.
- Evita utilizar los nombres de las enfermedades mentales sin certeza: Hay varias razones para ello. Cuando utilizas los nombres de las enfermedades mentales en situaciones inadecuadas, estás trivializando estas enfermedades, o directamente impidiendo que las personas compartan sus experiencias. Me explico: la expresión «bipolar», por ejemplo, se utiliza a veces para describir a una persona malhumorada. Sí, pero la bipolaridad es una enfermedad mental crónica. Ocurre lo mismo con «esquizo», que a veces se utiliza para describir a alguien que hace alguna «locura». Salvo que la esquizofrenia es una enfermedad mental que puede tener consecuencias muy graves. Por no mencionar el hecho de que a las personas afectadas por estas distintas discapacidades se les pueden echar en cara reacciones como «todos somos un poco así» cuando confían en nosotros. Pero no es así. Estamos hablando de enfermedades mentales que requieren tratamiento, a veces muy extenso, y un seguimiento psiquiátrico regular. Y ésa es una gran diferencia.
- Trata de evitar las expresiones peyorativas: Un giro peyorativo al hablar de discapacidad es decir, por ejemplo, «padece», «es víctima de» o «está afectado por» una discapacidad. ¿Por qué? Porque transmite una visión peyorativa de la discapacidad y fomenta una visión pasiva de la persona afectada. ¿Nuestro consejo? En su lugar, di que una persona «es» discapacitada.
#3 Promover la inclusión de los trabajadores discapacitados
Tomar medidas concretas
Para cambiar nuestra forma de ver la discapacidad, tenemos que pasar a la acción. Esto puede adoptar la forma de apoyar iniciativas integradoras, como actos accesibles a todos, campañas de sensibilización o programas de empleo para personas con discapacidad. Actuar para cambiar nuestra forma de ver la discapacidad significa fomentar la empatía y la interacción con las personas con discapacidad. Dedicando tiempo a escuchar sus historias, experiencias y perspectivas, podemos desarrollar un mejor entendimiento mutuo y ayudar a construir una sociedad más integradora.
Desmitificar las ideas preconcebidas
La discapacidad suele estar rodeada de estereotipos y prejuicios que alimentan la discriminación. Proporcionando información sobre las realidades de la discapacidad, deconstruyendo ideas preconcebidas y corrigiendo falsas creencias, podemos ayudar a derribar estas barreras y promover una visión más justa y respetuosa de las personas discapacitadas. Esto me hace querer poner a prueba tus conocimientos sobre el tema. ¿Estás preparado?
Poner a las personas en situaciones de la vida real
Ponerse en la piel de una persona con discapacidad, vivir su vida durante un acontecimiento, causa una impresión duradera y ayuda a cambiar las cosas. Por ejemplo, podrías :
- Ofrecer una inmersión en la oscuridad: los participantes toman conciencia de la discapacidad visual de una forma original a través de catas a ciegas, manipulación de objetos, lectura de Braille e información impresa en termogonflé…
- Organiza un taller de «café sin palabras» o «café de signos». El objetivo es que las personas sordas, con discapacidad auditiva y oyentes se encuentren y compartan un momento agradable tomando un café.
- Organiza un rally en silla de ruedas.
- Invita a los empleados a una iniciación a la lectura en braille o en lenguaje de signos.
- Planifica una sesión de Fútbol 5 adaptado, blindfutsal o blind football. Lo juegan atletas con discapacidad visual, con una pelota que emite un sonido al rodar.
Combinando estos tres pasos -informar, sensibilizar y actuar- todos podemos contribuir a cambiar la forma en que la gente ve la discapacidad y ayudar a crear una sociedad más integradora, respetuosa y solidaria.
Apasionado de las gastronomía, viajes, marketing y HRtech. Cuando no estoy explorando nuevos lugares o experimentando en la cocina, me encontrarás compartiendo conocimientos y tendencias de RRHH en mi blog.
